
Ir más allá en la lucha contra el cáncer de mama
Hunt es una Representante de Avon de tercera generación. Tanto su madre como su abuela son sobrevivientes al cáncer de mama. Y el año pasado, a sus 39 años, escogió participar en la Caminata AVON 39 para acabar con este mal.
Tres, dos, 39. Este es el grito de largada de la caminata que, para la representante de Texas (Estados Unidos), Stace Hunt, significa una conexión importante con Avon y la cruzada contra el cáncer de mama de la compañía.
Hunt vive en Beaumont, Texas, con su esposo y su hija. Fue maestra durante más de una década y empezó a vender productos de Avon hace dos años para complementar sus ingresos. Incluso, recuerda que su abuela era “una verdadera Dama de Avon”.
“Ella vendió Avon durante unos 10 años. Yo crecí con Avon en casa, viendo folletos y muestras. Tenía una estatuilla de la Sra. Albee (la primera Representante de Avon) por pertenecer al Club del Presidente”, cuenta. Cuando su abuela, Barbara Bellomy, se jubiló de Avon, todavía quería utilizar los productos, especialmente Imari. Así que la madre de Hunt se convirtió en representante (e incluso en una representante con ventas electrónicas) y Hunt siguió sus pasos.
Con varios clientes, a Hunt le encanta pedir productos de Avon, especialmente la ropa y ANEW Vitale. Y mientras ve cómo aumenta su negocio, va avizorando a una Representante de cuarta generación. “Tengo una hija adolescente de 13 años, Olivia, y le encantan los productos. Ella marca lo que quiere en el catálogo. También ayuda con el negocio, poniendo etiquetas en los folletos. Ella continúa el legado”.
Durante la Caminata Avon 2014 en Nueva York, Olivia estuvo con su mamá en espíritu, enviando continuamente mensajes de texto para animarla y para decirle lo orgullosa que estaba de ella. Cuando Hunt se cansó por el camino, se recordó a sí misma por qué estaba caminando, y de alguna manera el reto se volvió más fácil. La abuela de Hunt, que falleció en diciembre de 2013, sobrevivió al cáncer de mama, tras sufrir una mastectomía de uno de sus senos. Su madre, también una sobreviviente, tuvo una doble mastectomía, y la misma Hunt tuvo una lumpectomía.
“Reté a mi familia a vivir una vida digna de la vida que ella nos dio”, recuerda Hunt sobre la muerte de su abuela. Participar en la AVON 39 fue una forma de lograr eso. “Mi noche más emotiva fue después del primer día: cruzar la línea de meta y no poder llamar a mi abuela y compartir ese momento con ella”.
Pero Hunt estuvo agradecida por las amistades que hizo por el camino, mientras las participantes compartían sus experiencias con el cáncer de mama. “Cuando estábamos pasando sobre el puente de Brooklyn, pensé: no me puedo creer que estoy haciendo esto. Realmente me gustó escuchar las historias de todos por el camino”.
Hunt también tuvo la oportunidad de conocer a una participante especial en la caminata, la CEO de Avon, Sheri McCoy, quien era la capitana honorífica. “Cuando tus líderes caminan a tu lado de esa forma, eso marca una diferencia”.
Compromiso verdadero
La cruzada contra el cáncer de mama de Avon puso a la compañía a la vanguardia de la lucha contra esta enfermedad. Hoy en día, Avon es la compañía líder en el apoyo de la causa a nivel global y desde que lanzó esta cruzada, en 1992, sus programas contra este tipo de cáncer en más de 50 países contribuyeron con más de 800 millones de dólares, destinados a llevar a cabo investigaciones y mejorar el acceso a la atención de calidad para todos, independientemente de las posibilidades económicas.
Avon recauda fondos para la cruzada por medio de la venta de productos “Pink Ribbon” y a través de eventos, que incluyen la serie Caminata AVON 39 para Acabar con el Cáncer de Seno en los Estados Unidos y Caminata de Avon alrededor del Mundo contra el Cáncer de Seno.